Padmé Amidala
Padmé Amidala fue elegida Reina de Naboo en la edad de
catorce años, poco después de que ella se vio obligada a lidiar con la
ocupación de la Federación de Comercio. Su determinación para liberar a su
pueblo llevó a la remoción del Canciller Supremo Finis Valorum de la oficina,
la elección del Senador de Naboo Sheev Palpatine—secretamente Darth Sidious,
Señor Oscuro de los Sith—a la cancillería y la cadena de acontecimientos que
provocaron el estallido de la Guerra de los Clones. Amidala luchó en la Primera
Batalla de Geonosis que desató la guerra, poco después se casó secretamente con
el Caballero Jedi Anakin Skywalker. Pasó a ser una miembro destacada del Comité
Leal que intentó lograr la paz entre la República y la Confederación de
Sistemas Independientes. Sus esfuerzos eran a menudo polémicos en el Senado de
la República, una institución que favoreció en gran parte la derrota de los
Separatistas y la centralización del poder dentro de la Oficina del Canciller.
Antes del fin de la guerra, Amidala, que estaba embarazada
de gemelos, continuó su empuje para restaurar la libertad a la República por
ser una destacada miembro de la Delegación de los 2,000, un grupo que impulsó
al Canciller Palpatine a renunciar a su autoridad ejecutiva. En lugar de
renunciar a su poder, el secreto Lord Sith convirtió a Skywalker al lado oscuro
de la Fuerza y lo ungió como Darth Vader, marcó a la Orden Jedi como traidores
y comenzó la Gran Purga Jedi y transformó la República en el Imperio Galáctico.
Amidala rogó a Vader dejar el lado oscuro, pero creía que ella le había
traicionado y la atacó, hiriéndola gravemente en la luna volcánica de Mustafar.
Fue llevada por su amigo y antiguo maestro de Vader, el Maestro Jedi Obi-Wan
Kenobi, a Polis Massa, donde dio a luz a Luke y Leia antes de morir. Leia
siguió los pasos de su madre y se convirtió en un paladín de la democracia,
ayudando a liderar la Alianza para Restaurar la República y, en definitiva, la
Nueva República que se levantaron para derrotar al Imperio. Luke, como su padre
antes que él, se convirtió en un Caballero Jedi y convirtió a Vader nuevamente
a la luz. En los momentos finales de Vader, las últimas palabras de Amidala se
realizaron: aún existía el bien en su amado Anakin Skywalker.
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